Marinho: "Después del 7-1 en Oporto, habra que encomendarse a la virgen cuando vayamos al Camp Nou"

Les he preguntado a mis directivos si Belenenses siempre juega tan mal
Corregiremos errores: pero antes debo conocer a mis jugadores”

Vaya papeleta para el ex barcelonista Marinho! En la cola de la clasificación dela Ligá portuguesa tras el 7-1de las Antas y con un compromiso europeo de aúpa, a la vuelta de la esquina: nada más y nada menos que el F. C. Barcelona
ENVIADOS ESPECIALES: Alberto SANCHIS y Eduard OMEDES (fotos) Lisboa, 27.— Después del 7-1 de Oporto, Marinho Peres, el que fuera jugador del Barcelona y actual entrenador del Belenenses, es un hombre enfadado y bastante desmoralizado.
Esta goleada en contra es una bofetada para alguien acostumbrado a triunfar y que la pasada campaña, con Vitoria de Guimaraes, sólo conoció laureles — entre ellos, efiminar al At. de Madrid, de Vicente Miera, en la Copa de la UEFA — y palmadas en a espalda. Las cosas se han puesto feas. De regreso a Lisboa, a orillas del Tajo, la capital portuguesa es menos luminosa para él y los fados más tristes. — Algo debe quedar bien claro — nos suelta, de entrada - He hecholo que he podido, teniendo en cuanta que sólo había entrenado dos sesiones a mis nuevos jugadores. Nada más terminare! encuentro de las Antas le dije a mis directivos: “Pero siempre juega tan mal este equipo?” ¡Yo apenas los conozco! Seguro que Marinho se arrepiente — aunque no lo quiera reconocer — de haberse sentado en el banquillo el miércoles.
En principio estaba previsto que el Belenenses, en su partido de las Antas, estuviese dirigido por el segundo entrenador, el africano Vicente, aquel que fuera internacional portugués en el Mundial del 66.
Pero finalmente Marinho aceptó debutar ese día y la cosa no pudo salir peor. — Se han cometido muchos errores — reconoce Marinho —. Errores infantiles que hay que corregir cuanto antes. Aparte de la propia potencialidad del Oporto, nosotros no podemos seguir as hay que ser serios! La “herencia” que ha recogido de su antecesor, el belga Depireux, cesado hace un par de semanas, es pesada, muy pesada: — Yo no quiero hablar mal de Depireux — agrega — pero estoy viendo cosas incomprensibles. Por ejemplo, es una locura que Belenenses sea el único equipo de la Primera División portuguesa que no tenga un solo brasileño en sus filas. ¡ Con los que hay aquí ! Yo no digo que los tenga por tener ni que se traigan futbolistas vulgares. Pero sí hubiese sido conveniente buscar gente buena y barata, que la hay. La prueba es que precisamente en el Vitoria de Guimaraes, Marinho tenía a sus órdenes un buen ramitete de compatriotas suyos, que con futbol técnico y preciosista, ambicioso y efectivo, lo convirtieron en el equipo revelación del Campeonato portugués y de la UEFA. A hora Marinho añora esa aportación del fútbol carioca.

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